Por José M.Stella e Ignacio Montes de Oca | Eliminando Variables obtuvo en exclusiva los papeles de la polémica. Soberanía en juego.
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Carátula del dictamen 11-2013 de Susana Ruiz Cerruti |
A
la zona de la instalación de la base espacial en la región neuquina
de la Patagonia, los chinos la denominan simplemente como “Site
16”. En la Argentina,
en cambio, el lugar posee varios nombres; el gobierno de la provincia
de Neuquén, propietario de las 200 hectáreas tierras que reservó y
cedió en comodato por un período de 50 años para ser utilizada por
la Comisión Nacional de Actividades Espaciales de la República
Argentina (CONAE), la bautizó como “fracción
de tierra de lote E1, en un predio del Paraje Quintuco Pilmathue,
nomenclatura catastral 05-RR-011-5424-0000, del Departamento
Loncupué”. El
gobierno nacional, por otro lado, llama al sitio “Bajada
del Agrio”.
Cualquiera sea
el verdadero nombre de esa región neuquina, desde hace casi seis
años existe una fuerte controversia por el arribo del organismo
militar China Launch and Tracking Control General (CLTC), receptor
final del comodato de la CONAE con la provincia y responsable de la
construcción de 4 edificios, y la instalación de una antena,
telemetría y tecnología para “seguimientos terrestres, comando y
adquisición de datos” de las actividades espaciales de ese país.
Todo como parte integral de la Red China de Comunicaciones del
Espacio Lejano. Pero lo cierto es que como reveló la legisladora de
Neuquén por la Coalición Cívica-ARI Beatriz Kreitman en la 27°
sesión ordinaria del 06 de noviembre del 2014, en la zona
seleccionada por los chinos para la puesta en marcha del proyecto,
residía un poblador que tuvo que ser desplazado de “Bajada del
Agrio” por las autoridades provinciales.
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Carátula del dictamen de Alberto Dojas |
En el lapso de
esos seis años, oficialmente, se firmaron tres acuerdos con China
respecto a la construcción de la base en la provincia de Neuquén.
El primero, cronológicamente, fue el firmado el 28 de julio del
2012, entre la CONAE y CLTC; con posterioridad, el 28 de diciembre
del 2012, se rubricó un acuerdo tripartito entre la CONAE, CLTC y el
gobierno de la provincia de Neuquén; y por último, el acuerdo marco
del 28 de abril del 2014, entre la República Popular China y la
República Argentina, que fue ratificado por el Congreso Nacional a
fines de febrero del 2015, y publicado en el Boletín Oficial a
comienzos de marzo del año pasado.
Vale aquí
aclarar que al momento de ratificarse el acuerdo por parte del
Congreso, la base estaba en estado avanzado de construcción. De
hecho, había comenzado a erigirse desde marzo del 2013, cuando el
gobierno de Neuquén autorizó en Bajada del Agrio la perforación de
un pozo de agua. En otras palabras, ya estaba todo acordado y las
mayorías parlamentarias estaban aseguradas de manera que no había
riesgo alguno de comenzar las obras dos años antes de llegar a un
acuerdo.
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Articulo 4° del Acuerdo entre CONAE y CLTC |
El acuerdo, a
medida que se analiza su texto, tiene detalles en extremo
contreversiales. Por ejemplo, las autoridades argentinas,
desde un comienzo, aseguraron que el país a través de la CONAE
podría utilizar el 10 por ciento del tiempo la antena de la base
china, como mínimo, cuando así lo dispusiera. Esta afirmación es
correcta salvo por una curiosa condición. Según el acuerdo firmado
entre la CONAE y CLTC, la Argentina efectivamente podrá usar la
antena para investigaciones propias, pero mediante la solicitud de un
permiso escrito a CLTC, con -al menos- tres meses de antelación. Y
si la Argentina decidiera concluir el Acuerdo -según el
convenio-, deberá dar “un preaviso por escrito” a China de “al
menos 5 años previos a la fecha en que se pretende terminar el
acuerdo”.
Sin
embargo, lo más llamativo es un documento al que accedió
(Eliminando Variables),
firmado a comienzos del 2013 por la embajadora Susana Ruiz Cerruti.
La funcionaria, responsable por aquellos años de la Dirección de
Consejería Legal del Ministerio de Relaciones Exteriores (DICOL),
cita párrafos que mostrarían la existencia de un documento con
cláusulas secretas que no fueron publicadas (o quizá eliminadas con
posterioridad) en el acuerdo del 28 de abril del 2014, firmado entre
la República Argentina y la República Popular China, un convenio
que como se dijo fue ratificado posteriormente por el Congreso de la
Nación.
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Consideraciones de R.Cerruti sobre el acuerdo que se evaluaba con CLTC |
Ruiz Cerruti,
recordemos, es una de las diplomáticas de mayor fuste y
reconocimiento existentes en la Argentina. Ex ministra de Relaciones
Exteriores en el gobierno de Raúl Alfonsín, durante la gestión de
Héctor Timerman en el Palacio San Martín fue prácticamente borrada
de la primera línea de funcionarios y destinada una consejería. Sin
embargo, tras el incidente con la Fragata Libertada en Ghana, hecho
ocurrido a fines del 2012 y donde se retuvo al barco escuela de la
Armada Argentina, tuvo que ser desempolvada de urgencia por el
gobierno de Cristina Fernández.
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¿Ruiz Cerruti hace mención a cláusulas secretas? |
El dictamen de
Ruiz Cerruti, que será tratado en detalle más adelante, por ejemplo
alerta sobre la existencia de ciertas exenciones judiciales para los
ciudadanos chinos que se trasladen a trabajar a la base de Bajada del
Agrio. Textualmente, la experta dice: “Y art 5, párrafo 2, inciso
(3), cuya primera oración reza: “Se otorgará a los empleados de
CLTC exención judicial por expresiones escritas y orales en su
trabajo para la estación de espacio lejano”, y su inciso (7) que
establece que “la Argentina permitirá la importación libre de
impuestos para artículos de subsistencia de empleados de CLTC al
territorio argentino de conformidad con la legislación argentina”.
Estas cláusulas desaparecieron del articulado final del texto
aprobado y dado a conocer oficialmente por el Kirchnerismo, o bien se
firmó algún acuerdo paralelo, con cláusulas secretas como éstas,
como muchos suponen.
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Firma de Ruiz Cerruti en el dictamen 11-2013 |
El texto del
proyecto de acuerdo inicial entre ambos países para la instalación
de la base, según se desprende de la documentación en poder de este
blog, fue elaborada entre septiembre y diciembre del 2011,tanto por
miembros del Ministerio de Relaciones Exteriores, la Secretaría
General de la Comisión Nacional de Actividades Espaciales y
funcionarios chinos. De hecho, Ruiz Cerruti revela en un documento
que mediante una nota la Dirección de Seguridad Internacional
Asuntos Nucleares y Espaciales del Ministerio de Relaciones
Exteriores (DIGAN) había realizado el 21 de septiembre del 2011 un
breve resumen de los antecedentes del acuerdo, concluyendo que
“correspondería darle curso favorables a la negociación del
citado Proyecto de Acuerdo”, solicitándole opinión a otras
reparticiones estatales del Ministerio de Relaciones Exteriores, como
así también al Ministerio de Economía y a la Administración
Federal de Ingresos Públicos.
Existe, además,
un memorandum elaborado en mayo del 2013 por la AFIP (con
posterioridad al texto de Ruiz Cerruti), que revela la existencia en
paralelo de dos borradores de acuerdos con China: el primero,
elaborado por la Comisión Nacional de Actividades Espaciales
(CONAE), organismo descentralizado pero cuyo jefe principal era el ex
ministro de Planificación Federal Julio De Vido; y otro realizado
por el gobierno chino.
Sobre este
memorandum de la AFIP, así como documentación de otras, serán
tratadas en extenso en un segundo artículo.
La trama
de la instalación china
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El funcionario Dojas hace una descripción de las negociaciones |
La
trama inicial del arribo de los chinos con la intención de instalar
una base espacial en la Argentina, se explica en un documento fechado
el 21 de diciembre del 2011 por Alberto Dojas, entonces Director de
Seguridad Internacional, Asuntos Nucleares y Espaciales del
Ministerio de Relaciones Exteriores de la República Argentina
(DIGAN), y al que accedió (Eliminando Variables).
En ese escrito de solo 3 páginas, Dojas afirma: “La
propuesta de Acuerdo tiene como antecedente un desplazamiento a
nuestro país -en mayo de 2010- de una misión de autoridades y
funcionarios espaciales de China, que manifestó que ese país se
encuentra empeñado en la construcción de una estación en el
hemisferio sur del Continente Americano (junto con otros ya
instaladas o a instalar en otras regiones) con una antena de
aproximadamente 35 metros de diámetros, a efectos de tener la
cobertura y visibilidad casi completa de la Tierra para las misiones
de investigación del espacio profundo”.
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Más del historial de negociaciones con China |
Habría
que aclarar, sin embargo, que existe un documento de la CONAE, con
fecha del 29 de abril del 2010, en el que se solicitaba a la Comisión
Nacional de Comunicaciones (CNC) que analizar el espectro
radioeléctrico de 5 sitios seleccionados por la República Popular
China para instalar una antena “para
dar apoyo a las misiones satelitales de ese país para la exploración
de la Luna y Marte”.
De hecho, ese mismo escrito afirma que el 29 de abril del 2010, se
reunieron la delegación china, la CONAE y el ingeniero Juan
Masciotra de la CNC, resultando en la primera reunión oficial en la
Argentina con representantes de ese país.
Tras
explicar que inicialmente las opciones de los chinos para instalarse
en la región eran la Argentina o Chile, Dojas dice: “En
el contexto de la mencionada misión espacial china, el titular de la
delegación de ese país, Niu Hongguang (Deputy Commander in Chief,
China Manned Space Engineering Program and China Lunar Exploration
Program) además de señalar su interés en lograr un conocimiento
mutuo y generar un intercambio de información y percepciones, dio a
entender que, de construirse en territorio argentino, ello
constituiría un gran gesto del Gobierno Argentino, que daría
muestra de un muy buen entendimiento y relaciones bilaterales
profundas y amplias”.
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Firma y pedido de opinión a otros entes por parte de Dojas |
El mismo Dojas,
en el documento, revela que los expertos de CLTC estuvieron
recorriendo las provincias de Neuquén y de Río Negro, identificando
la zona de Zapala (Neuquén) y de General San Martín (Río Negro)
como los que reunían “las condiciones necesarias”. El
funcionario, además, explica que durante los meses subsiguientes del
2010, fueron enviadas desde China a la Argentina “misiones chinas
integradas por expertos para realizar los correspondientes estudios
científicos, tecnológicos, geológicos, electromagnéticos,
ecológicos y climatológicos”. Y explica que gracias a la
“deferencia, predisposición y asistencia brindada por la CONAE”,
los enviados chinos pudieron desplazarse y apreciar in situ entornos
puntuales en las provincias de Neuquén y Río Negro”.
Ahora bien:
¿Cuántos lugares visitaron los funcionarios militares chinos en la
Argentina? Según respondió ante preguntas de legisladores en el
Congreso Nacional, el ex jefe de Gabinete de Ministros, ex gobernador
y actual intendente de la ciudad de Chaco, Jorge Milton Capitanich,
dijo que “fueron analizados 8 sitios en distintas provincias
argentinas que compitieron con diversos sitios de Chile, considerada
como otra posible sede para la antena china” y la estación
terrena de apoyo (denominada Deep Space 3). Como se verá más
adelante, 5 de los 8 sitios seleccionados por miembros de CLTC
estaban en la provincia de Neuquén.
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Carta del ingeniero Italiano a autoridad de CLTC |
Respecto a
cuántas veces funcionarios chinos visitaron el país por aquellos
días, el número se desconoce.
El mismo Capitanich
justificó la instalación de los chinos en la Argentina, al afirmar
que los militares de ese país había tomado nota del acuerdo
suscrito en el año 2009 entre el Gobierno argentino y la Agencia
Espacial Europea, un organismo civil, que se instaló una antena para
investigación del Espacio Lejano en Malargüe, provincia de Mendoza,
con “similares características a la propuesta por China” (sic).
Y afirmó que “al momento de la evaluación, el país asiático
consideró la experiencia que había tenido en Chile con la
cooperación recibida para sus misiones satelitales por parte de
antenas alojadas en territorio de dicho país”.
Existe
un documento adicional, denominado Nota N° 29/11, fechada el 16 de
mayo del 2011 y firmado por el ingeniero Adolfo Luis Italiano,
Director de Planificación y Desarrollo de Tecnologías de la
Información de la provincia de Neuquén, dirigida a un “estimado
Sr. Ma Zhiqiang”.
Allí se revelaba que uno de los lugares preseleccionados había sido
una localidad cercana a Zapala, que la comitiva china vio como apto
para la instalación de la antena. Sin embargo, en el texto Italiano
destacó que “tuvo una fuerte reacción por parte de los pobladores
cercanos al mismo, perteneciente a la Comunidad Gramajo de pueblos
originarios”. Y remarcó: “La
manifiesta oposición de los pobladores vecinos, expresada en una
serie de reuniones con ellos mantenidas, ha obligado a suspender las
evaluaciones del sitio y terminar con los estudios pertinentes de
manera anticipada”. La
misiva a Ma Zhiqiang, que muestra que el gobierno de Neuquén estuvo
en conocimiento inicial del tema de la instalación de la base
(aunque después fue marginado), terminaba con un “no obstante, se
encuentra bajo análisis la evaluación de otros sitios posibles
dentro de la provincia de Neuquén que reúnen las condiciones
requeridas”.
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Documento del INPRES para CLTC sobre movimientos sísmicos |
Por
otra parte, el texto de Dojas, funcionario del ministerio de
Relaciones Exteriores, aseguró que Hongguang (un militar de altísimo
rango en China) “hizo
expresa la tesitura china de que el proyecto fuera convenido entre
ambos Estados a través de tratados específicos, utilizando los
conductos diplomáticos regulares, con la intervención de la
Administración Nacional Espacial China (CNSA). El Director Ejecutivo
y Técnico de la CONAE -Dr Conrado F Varotto- señaló no percibir
problema alguno, resaltando que en los temas en los que hay un
evidente interés público, existe en nuestro país una gran
participación de sectores, organizaciones y personas”.
El
documento, a la vez, relata que en noviembre del 2010, el entonces
Embajador de la República Popular China, Sr. Zeng Gang, había
transmitido que la estación “tendría
por objetivo proveer servicios de control durante la etapa de
lanzamiento y de recepción de las misiones espaciales de la
Administración Nacional Espacial China, en el marco del Programa
Nacional de China para la Exploración de la Luna y de Marte”.
Y agregó, sin citar una fecha exacta: “China decidió finalmente
inclinarse por la ubicación en la Provincia de Neuquén, y
presentó la propuesta de texto que
se encuentra incorporado en las presentes actuaciones”.
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Comodato del gobierno de Neuquén a la CONAE |
Alberto
Dojas, que se mostró favorable a la instalación de la base china,
inmediatamente dice: “La
CONAE ha hecho notar que la magnitud del proyecto y el grado de
colaboración que se requiere para asegurar la exitosa instalación y
operación de este instrumental de última generación representa una
oportunidad única para la Argentina para demostrar su capacidad en
el campo de las tecnologías de avanzada”,
al mismo tiempo que resaltaba la importancia de estrechar lazos con
la República Popular de China en el marco del Convenio de
colaboración “que
nuestro país ha firmado con la CNSA”.
También subrayaba que se preveía el aprovechamiento por parte de la
CONAE de un porcentaje de utilización de la antena (10 por ciento
como mínimo) para sus propios proyectos.
En estos
últimos puntos del texto del funcionario de Seguridad Internacional,
Asuntos Nucleares y Espaciales, no queda del todo claro si dentro del
denominado Programa Nacional de China para la Exploración de la Luna
y de Marte no podría filtrarse un lanzamiento de un satélite
militar espía, que desvirtuaría los convenios firmados por ambos
países. Fundamentalmente porque CLTC es un organismo militar, muy
diferente a la ESA europea. Y también surge el interrogante sobre la
cantidad de texto y cláusulas modificadas del documento presentado
originalmente por China para acordar con la CONAE y la República
Argentina que, como se verá más adelante, posee demasiados
beneficios para el país asiático.
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Disposición del gobierno neuquino sobre el lugar seleccionado |
Lo que los funcionarios
argenitnos omitieron mencionar es la diferencia entre la Agencia
Espacial Europea que lleva adelante solo programas civiles, y la China
Launch and Tracking Control General (CLTC), que es una dependencia
del complejo militar chino, y cuyas actividades locales deberían ser
monitoreadas para asegurarse que no hay propósitos bélicos en la
base que se instala en la Patagonia. Desde 1993, la
Argentina es miembro de la Missile Technology Control Regime (MTCR) y
como tal está obligada a informar si en nuestro territorio se
realizan actividades vinculadas al uso bélico de tecnología
misilística de cualquier naturaleza. De hecho, la Argentina se ha
comprometido a no desarrollar o participar en actividades militares
prohibidas por el MTCR.
En el caso de la base china,
no queda claro cómo hará la Argentina para obtener información del
uso que se hace de las instalaciones - o como puede obligar a sus
socios a entregar dichos datos si surgiera la necesidad-, si los
satélites que se monitorean desde allí tienen también uso bélico
y de qué manera podrán asegurar que la instalación no es parte de
un sistema defensivo extranjero. El MTCR es en extremo exigente al
respecto y el affaire del misil Cóndor II demostró que se trata de
un organismo que no admite posiciones ambiguas cuando se trata del
desarrollo y uso de tecnologías con propósitos bélicos, como puede
ser el sistema de GPS propio que Pekín se propone desarrollar para
que sea utilizado por sus naves civiles y militares o en los sistemas
de guía de sus misiles y bombas.
Neuquén
desconocía qué estaba negociando el Kirchnerismo con China
El
gobierno de la provincia de Neuquén, que para ese entonces se
encontraba liderado por el ex gobernador Jorge Augusto Sapag, mostró
inicialmente los terrenos a funcionarios chinos para lograr la
instalación de la base. La Nota N° 29/11, firmada por el ex
funcionario Adolfo Italiano y a la que ya se hizo referencia, estaba
dirigida al “Estimado Sr. Ma Zhiqiang”, seguramente un miembro de
la comitiva de CLTC. En ese mismo documento de mayo del 2011,
Italiano mostraba “el sumo interés” de Neuquén en la
instalación de la “3ra
antena de la China Satellite Launch and Tracking Control General”.
Y le recordaba a la vez a Zhiqiang “la
puesta a disposición de la delegación de CLTC la información sobre
las posibles áreas para la selección del sitio definitivo”.
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Dojas revela que Neuquén en el 2011 no estaba al tanto de lo que se negociaba |
Casi
en paralelo a esa carta, desde la CONAE y por solicitud de las
autoridades de la CLTC, se le solicitaba al Instituto Nacional de
Prevención Sísmica (INPRES) -dependiente del ex Ministerio de
Planificación Federal-, el análisis de la peligrosidad sísmica de
“5 sitios de
emplazamiento seleccionados por la China Launch and Track Control
General (CLTC) para la instalación de una estación terrena para el
estudio del Espacio Ultraterrestre, en la provincia de Neuquén”.
Mediante la nota N° 93-S-INPRES-2011, fechada en la provincia de San
Juan y dirigida al Secretario General de la Comisión Nacional de
Actividades Espaciales, Félix Clementino Menicocci, se mostraba que
sólo 2 de los 5 lugares seleccionados por las autoridades militares
chinas tenía peligrosidad sísmica reducida (los sitios Nro 3 y 5).
Tal como se
informó previamente, a fines del abril del 2010, la CONAE le había
solicitado a la Comisión Nacional de Comunicaciones (CNC) que
analice el espectro radioeléctrico de esas cinco zonas seleccionadas
en Neuquén. De manera “oficial”, la respuesta de la CNC llegó
casi dos años después, el 31 de enero del 2012, mediante la nota
CNCGI 04/2012, que le recomendaba a las autoridades chinas la
instalación de la base en una coordinadas determinadas, ya que en
los lugares sugeridos no había interferencias o superposiciones.
Específicamente, la CNC le recomendó a CLTC el área comprendida
entre las coordenadas 38°05´00” a 38° 13´00” Sur (S) y
70°05´00” a 70°20´00” Oeste (W).
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Ruiz Cerruti confirma cuándo se le informó a Neuquén |
Existen
algunas curiosidades: por lo visto, desde la visita de la
misión china a la provincia de Neuquén en el 2010, ese
gobierno provincial no conocía todo lo que se estaba negociando con
China hacia fines del 2011. Por
ejemplo, en el documento de Alberto Dojas, firmado el 21 de diciembre
del 2011, hacía referencia a que en el borrador del Acuerdo entre la
Argentina y China, CLTC ponía sobre la mesa algunas exigencias que
excedían el dominio del Ministerio de Relaciones Exteriores. “Se
estima conveniente informar a la Provincia del Neuquén sobre la
negociación del Acuerdo y sobre el respectivo texto, consultando su
avenimiento sobre el contenido y tenor de las disposiciones que
competen a ese Gobierno Provincial”,
escribía.
¿A
qué se refería Dojas con esos dichos? Sucede que CLTC había
solicitado, como se dijo, una serie de compromisos a ser asumidos por
la provincia de Neuquén. Entre ellos, según remarcaba el
funcionario, se encontraba el “comodato de uso durante
50 años (con acceso y/o disponibilidad de carreteras, suministro de
agua, provisión de energía eléctrica, líneas de comunicación)”
a través del convenio sobre uso de
tierras por la CLTC en dicha provincia, como así también el uso
tecnológico de las instalaciones, y “la exención de
restricciones administrativas a la instalación de la estación
terrena”.
De
acuerdo con el documento de Susana Ruiz Cerruti, recién se le
informó fehacientemente a la provincia de Neuquén, el 16 de febrero
del 2012. Ruiz Cerruti, afirma: “A través de la nota
DIRFE 22/2012 (fs 33/35), de fecha 16 de febrero de 2012, la
Dirección de Asuntos Federales y Electorales de este Ministerio,
además de informar sobre la negociación del Proyecto de Acuerdo al
Director General de Relaciones Internacionales de la Provincia de
Neuquén, Lic. Pablo Casals, y remitírsele copia del mismo, consulta
el avenimiento de esa Provincia sobre su contenidos y disposiciones
que competerían al Gobierno Provincial”.
De
inmediato, el texto de Ruiz Cerruti agrega: “A
fs- 52/53m se agrega nota 228/12, de fecha 30 de marzo de 2012, por
la cual la Subsecretaría de Planificación y Acción para el
Desarrollo (COPADE) del Ministerio de Desarrollo Territorial de la
Provincia de Neuquén da respuesta a la nota DIRFE 22/2015 informando
el “buen avenimiento del Gobierno de la Provincia de Neuquén
respecto a la concreción del Proyecto de Acuerdo de Cooperación”
de marras”. En efecto,
el escrito de Ruiz Cerruti se complementa con una nota previa (N°
0008/12.SGP), emitida el 23 de febrero del 2012, por el Secretario de
Obras Publicas de la Provincia de Neuquén, ingeniero Rodolfo Lafitte. Este
funcionario neuquino le informa al Secretario General de la CONAE,
Félix Menicocci, que le informa que “el
sitio preseleccionado, ubicado al norte de la localidad de Bajada del
Agrio, denominado “Site 8-2”, con las siguientes coordenadas
geográficas: 38°11´66,07” S y 70°8´29,7” W, se encuentra
dentro de la parcela de Nomenclatura Catastral 05-RR-011-5424-0000 ,
propiedad del estado provincial”.
Y agrega que “el predio
de 200 hectáreas, requerido para este proyecto, se encuentra en
condiciones de ser asignado al programa espacial chino por el término
de 50 años, para lo cual será necesaria la suscripción del
respectivo acuerdo entre el Gobierno de la Provincia de Neuquén y el
Gobierno Nacional”.
Con
las autoridades de la provincia de Neuquén al tanto de las
negociaciones entre la Argentina y China, el 28 de junio del 2012 el
ministro de Desarrollo Territorial de Neuquén, Elso Leandro Bedoya,
emite la resolución 391/2012, relacionada con el expediente N°
4340-001302/12, en donde se le reserva a “la Comisión Nacional de
Actividades Espaciales (CONAE), y por un período de 50 años, una
fracción del Lote E1, con una superficie estimada de 200 hectáreas,
nomenclatura catastral 05-RR-011-5424, Plano de Mensura
E2756-3907/00, del Paraje
Quintuco Pilmathue, Departamento Loncupué, provincia de Neuquén,
destinada a la instalación de un Centro de comandos y adquisición
de datos que incluye una Estación Satelital del Programa de
Exploración de Luna y Marte, llevado a cabo por la Administración
Nacional Espacial China (CNSA) de la República Popular China”.
Según los considerandos de Bedoya, el lote E1, en total, tiene una
superficie de poco más de 1771 hectáreas.
Los
primeros acuerdos con CLTC y el uso con permiso escrito de la base
por parte de la CONAE
Con
los terrenos en manos de la CONAE, el 20 de julio del 2012, el
Director Ejecutivo de ese ente, Conrado Varotto, y un funcionario de
CLTC (no legible por estar en idioma chino) firman el llamado
“Acuerdo de Cooperación en el Marco del Programa Chino de
Exploración de la Luna entre el China Satellite Launch and Tracking
Control General (CLTC) y la Comisión Nacioanl de Actividades
Espaciales (CONAE) de la República Argentina para establecer
instalaciones de seguimiento terrestre, comando y adquisición de
datos, incluida una antena para investigación del espacio lejano, en
la provincia de Neuquén, Argentina”. En total, el documento
consiste en 18 artículos con seis anexos, de 24 páginas de
extensión.
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Carátula del Acuerdo entre CONAE y CLTC |
Entre
los puntos más sobresalientes del convenio, surge el artículo 4,
inciso (a). Allí se establece el tiempo de utilización efectiva de
la antena de espacio lejano. “La utilización efectiva por parte de
CONAE del uso del 10% del tiempo de la antena de espacio lejano, por
año, no acumulable a través de los años. A tal fin, CONAE podrá
instalar, mantener y operar equipamiento para procesamiento de datos
a su propio cargo, sobre una base de no interferencia con las
actividades de apoyo a las misiones de CLTC. CONAE
coordinará dicha actividad con CLTC mediante solicitud escrita
remitida, al menos, con tres meses de antelación”. Es así que el
beneficio tecnológico promocionado como una de las justificaciones,
quedaba reducido a un permiso que debía pedirse con muchas semanas
de antelación y la presencia de científicos argentinos de manera
permanente para asimilar el know how se convirtió en una utopía. Al
menos, eso es lo que indica el testimonio de uno de los legisladores
que criticó en acuerdo.
Esta última
parte del acuerdo entre CLTC y la CONAE, parece habérsele salteado
al Secretario de Obras Públicas de la Provincia de Neuquén, Rodolfo Lafitte, quien aseguró en septiembre de 2014 ante un canal de televisión local: “La CONAE se reserva como mínimo el 10 por
ciento del tiempo, cómo mínimo. Porque un senador a nivel nacional
dijo que “solo le dan el 10 por ciento”. No. Como mínimo. Cuando
no haya misiones exploratorias chinas, tenemos las 24 horas del día
para usarla. O sea, va a ser puesta a disposición del ambiente
científico y tecnológico de la región, porque esas antenas que
trabajan en microondas pueden recibir señales del espacio, y poder
monitorear, como se hacen en tantos observatorios a nivel
internacional, señales del universo o de otras constelaciones u
otros cuerpos celestes, en las bandas de microondas en las que opera
esta estación” (Sic). Claramente las palabras de Lafitte, se
oponen con la letra del convenio con CLTC. Además, en ninguno de los
acuerdos relevados (salvo que existan cláusulas reservadas) figura
explícitamente que la CONAE o la provincia de Neuquén podrán
utilizar durante las 24 horas, si así lo desean, las instalaciones
chinas.
Otro de los
puntos interesantes es el artículo 15. En sus dos primeros incisos
se afirma que las partes se consultarán mutuamente sobre cuestiones
que surjan de la interpretación, aplicación o ejecución del
acuerdo. Y luego agrega que si las máximas autoridades de CLTC y la
CONAE no pueden dirimirlas, se constituirá un comité de arbitrajes
compuesto por representantes de ambas partes, más un tercero
designado de mutuo acuerdo. Y se aclara, en el punto 3ro, que el
arbitraje tendrá lugar en Beijing, China, si la CONAE fuera la parte
que somete la disputa a arbitraje, y en Buenos Aires, si CLTC fuera
la que sometiera la disputa a arbitraje.
El artículo 16
se refiere al que el acuerdo permanecerá vigente “por un período
inicial de 50 años hasta la fecha de extinción de comodato”. Y
dice: “Cualquiera de las Partes podrá dar por terminado este
Acuerdo en cualquier momento, con un preaviso cursado por escrito a
la otra Parte de al menos cinco (5) años previos a la fecha en que
se pretende extinguir este Acuerdo”.
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Carátula del Acuerdo Tripartito |
Poco más de
cinco meses después, el 28 de diciembre del 2012, la provincia de
Neuquén, la CONAE y CLTC, firmaron el segundo convenio denominado
“Acuerdo de Cooperación en el Marco del Programa Chino de
Exploración de la Luna entre la China Satellite Launch Program, la
Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE) de la República
Argentina y la Provincia de Neuquén para establecer las condiciones
que rigen la implantación de las instalaciones de seguimiento
terrestre, comando y adquisición de datos, incluida una antena para
investigación del espacio lejano en la Provincia de Neuquén,
Argentina”. El documento consiste en 15 artículos, cinco anexos y
una extensión total de 17 páginas.
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Compromisos asumidos por la provincia de Neuquén |
Quizá el punto
más interesante del acuerdo sea el artículo 2.3, en donde figuran
los compromisos asumidos por Neuquén. La provincia, según el inciso
(4), autorizó la construcción, a 11.5 kilómetros de la Estación,
de una “Torre de Calibración”, en un predio de 10 metros
cuadrados. Por otra parte, en el inciso (6), Neuquén se compromete a
“realizar las inversiones necesarias” para la ampliación de la
estación transformadora que el Ente Nacional Provincial de Energía
posee en Las Lajas a fin de soportar los requerimientos de consumo de
la base. De hecho, el consumo de la base requiere un total de 1.500
KW, de los cuales 861 KW son destinados para los equipos, 600 KW para
el servicio de calefacción y 39 para el uso de actividades
domésticas del personal. También en otro inciso se compromete a
facilitar un cable de fibra óptica con una banda inicial de 40
Mbits/s y, en otro ítem, a mantener el buen estado permanente a la
Ruta Provincial N°31, que vincula la Ruta Nacional 40 con el sitio
de la base. Todo esto, por supuesto y salvo que algún documento
secreto diga lo contrario, deberá ser pagado por los contribuyentes
de Neuquén sin que se explique claramente cual es el beneficio que
obtendrán a cambio, salvo por el hecho de poder henchir el pecho y
decir que tienen una base espacial en su provincia.
En los
considerandos del acuerdo tripartito, se aclara que “se encuentra
bajo negociación” un Acuerdo de Cooperación entre el Gobierno de
la República Popular China y el Gobierno de la República Argentina
sobre el establecimiento de la Estación Espacio Lejano de China en
Neuquén.
El
documento de Susana Ruiz Cerruti y las cláusulas secretas por la
base china
La embajadora
Susana Ruiz Cerruti, a través del Dictamen 11/2013, N° 1507/12
Letra DICOL, con expediente del Ministerio de Relaciones Exteriores
0066504/2011, y firmado el 11 de enero del 2013, tuvo acceso a un
borrador del denominado “Proyecto de Acuerdo entre la República
Argentina y la República Popular China sobre proyecto de instalación
de Estación de Estudio del Espacio Profundo por China en Provincia
de Neuquén”, que resultó mucho más amplio y controvertido que el
finalmente aprobado por el Congreso de la Nación a fines de febrero
del 2015.
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Descripción de Ruiz Cerruti sobre supuestos acuerdos adicionales con CLTC |
Al hacer la descripción de cada uno de los artículos del proyecto de Acuerdo, salta a la vista el artículo 2, que dice, de acuerdo con el dictamen de Ruiz Cerruti: "Cada parte designa a sus respectivas Autoridades Ejecutivas, estableciéndose que ellas firmarán un convenio de implementación por separado para la construcción, operación y gestión de la estación del espacio lejano". Estos acuerdos específicos sobre construcción, operación y gestión de la base china, nunca fueron dados a conocer por las autoridades argentinas.
Probablemente
la parte más sustanciosa del documento de 8 páginas de la ex
Canciller y abogada experta en Derecho Internacional y que en ese
momento era responsable de la Dirección de Conserjería Legal del
Ministerio de Relaciones Exteriores (DICOL), sea la de las
denominadas “Consideraciones”, en donde advierte los
privilegios, derechos y facultades que gozarían gracias a ese
acuerdo las autoridades y empleados de la China
Launch and Track Control General (CLTC), como así también de la
renuncia a importantes atribuciones y facultades por parte del
gobierno argentino.
Ruiz
Cerruti afirma en el documento al que accedió (Eliminando
Variables): “A titulo preliminar, esta DICOL advierte que el
presente proyecto para el establecimiento y operación de una
estación de espacio lejano, que incluye un sistema de antena de
espacio lejano en la provincia de Neuquén, confiera a la República
Popula de China, a la Oficina General de Control de Lanzamiento y
Seguimiento de Satélites China (CLTC), a sus autoridades y a sus
empleados en la construcción y operación de la misma, una
serie de privilegios, derechos, facultades, exenciones y garantías
de gran amplitud. Asimismo, mediante algunas de sus cláusulas se
renuncia a importantes facultades y atribuciones del Estado
Argentino”.
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Clausulas criticadas por Ruiz Cerruti |
El
documento de Ruiz Cerruti nombra parte de las clausulas que muchos
considerarían secretas en el acuerdo con la República Popular
China.
Por ejemplo, en el artículo 1° párrafo 2, según la opinión de la
diplomática, con la entrega del comodato por 50 años, también se
entregarían bajo esa figura legal “carreteras, líneas de
comunicación, energía eléctrica y suministro de agua”. En el
caso del artículo 3, párrafo 2, la abogada remarca que la República
Argentina, antes de tomar cualquier decisión que pudiera interferir
con la operatoria de la base, “debe realizar una consulta previa a
CLTC”.
Otro de los
puntos controvertidos, de acuerdo con el documento de Ruiz Cerruti,es
el artículo 5, párrafo 1, incisos (1), (2) y (3), “por los que se
establecen exenciones impositivas y se requiere la aprobación de
China para expropiar o embargar equipamiento o instalaciones de la
estación de espacio lejano”. De igual forma, y tal como se informó
previamente en este mismo artículo, la especialista hizo foco en el
artículo 5, párrafo 2, inciso (3), cuya primera oración dice: “Se
otorgará a los empleados del CLTC exención judicial por expresiones
escritas y orales en su trabajo para la estación de espacio lejano”,
y su inciso (7) que dice que “la Argentina permitirá la
importación libre de impuestos para artículos de subsistencia de
empleados de CLTC al territorio argentino de conformidad con la
legislación argentina”. Cabría preguntarse por qué el texto
de las cláusulas descritas por Ruiz Cerruti muestran tanto interés
de China en mantener alejado a las autoridades administrativas y
judiciales argentina, si solamente se trata de una base de
seguimiento de actividades del espacio lejano, y no una base militar.
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"Privilegios" de CLTC, según describe Ruiz Cerruti |
Quizá ante el
temor a ser reprendida, sancionada o simplemente para mantener
objetividad, la responsable de la DICOL, por otro lado, expresó:
“Esta Consejería Legal advierte que no emite aquí un juicio de
valor sobre tales privilegios, derechos, facultades, exenciones y
garantías, sino que se limita a llamar la atención sobre ellas y su
contenido”. Y posteriormente agrega: “La aprobación de cláusulas
como las aquí señaladas implica razones de oportunidad, mérito y
conveniencia ajenas a esta DICOL, respecto de la cuales deberían,
luego de una profunda evaluación, expedirse las áreas políticas de
esta Cancillería”.
Vale nuevamente
la obligación de aclarar que muchas de las cláusulas a las que se
refiere Ruiz Cerruti en su documento no es el oficialmente aprobado
por el Congreso de la Nación, y el firmado, también oficialmente,
por las autoridades nacionales con la República Popular China. En
todos los casos se refiere a un "texto fantasma" cuya
existencia es corroborable por la existencia de un dictamen que lo
cita.
En las últimas
2 páginas de la nota 11/2013, la funcionaria propone modificar
terminología (al sugerir reemplazos de palabras o párrafos
completos) para acomodarlas a un texto acorde al derecho
internacional. Sin embargo, existen 3 párrafos en los que hace
nuevamente una advertencia sobre el artículo 5, párrafo 2,
inciso (3), colocando el texto completo de esa cláusula. La misma
dice: “Sin la aprobación de China, las entidades e
instituciones o individuos de la Argentina no podrán expropiar o
embargar bajo ninguna circunstancia el equipamiento y las
instalaciones o bienes y documentación de la estación de espacio
lejano. El equipamiento y las instalaciones, bienes y documentación
de la estación de espacio lejano no estarán sujetos a restricciones
administrativas o judiciales de ningún tipo”.
Inmediatamente,
Ruiz Cerruti opina: “Sobre esta cláusula, cabe advertir que la
misma está sujeta el derecho del Estado argentino a expropiar por
causas de utilidad pública o adoptar medidas de embargo, con
respecto al equipamiento y las instalaciones, bienes y documentación
de la estación de espacio lejano a la “aprobación de China”.
Asimismo, implica una renuncia por parte del Estado argentino a
imponer sobre ellos cualquier medida de tipo administrativa o
judicial. Como se señalara en el apartado 1) precedente, su
conveniencia y/o pertinencia debería ser evaluada por las
autoridades argentinas competentes”.
La base china
comenzó a instalarse muchos años antes que los acuerdos que le
daban legalidad estuvieran siquiera redactados. Y el trámite está
plagado de secretos, concesiones propias de un territorio regido por
las convenciones que protegen a los territorios diplomáticos y
manejado desde el Poder Ejecutivo Nacional con una participación muy
secundaria de la provincia que cede los terrenos para que se
construya. Existe un protocolo secreto que amplía esa cesión de la
soberanía y los privilegios e inmunidades impositivas y personales a
los que trabajan en ella. En una segunda parte, describiremos como se
completa la trama de la instalación de la base china en la Patagonia
Argentina, ese complejo que por medio siglo podrá hacer sus tareas
protegido por un blindaje legal que los funcionarios del gobierno de
Cristina Kirchner les otorgaron a cambio de una imprecisa ganancia
para el fisco y el sistema científico nacional.
Continúo publicando gracias a los que me apoyan para seguir haciendo periodismo libre, sin sugerencias de anunciantes y funcionarios
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Base espacial lunar my ASS! En qué nos metió el kirchnerismo con esta truchada que entrega soberanía?
ResponderEliminarNecesitamos desclasificar los documentos para saberlo
EliminarEl escritor Henning Mankell denuncia en una de sus novelas el imperialismo chino de siglo XXI haciendo inversiones en recursos naturales y exportando personas. También alertaba de la penetración en América Latina.
ResponderEliminarQue le vamos a hacer, el zurdaje argento odia a USA pero viaja a NY y ama a los déspotas rusos y chinos.
PArece ser que el gobierno anterior eligió estar claramente en uno de esos bandos
EliminarNota con muchísimos datos. Excelente además! Por lo que entiendo Ruiz Cerruti intentó en todo momento advertir de la cagada que se estaban mandando con esas cláusulas. El o los que firmaron este disparate, tendrá que seguramente que pasar por la justicia! Nuevamente mis felicitaciones muchachos
ResponderEliminarGracias Connie, seguramente el tema amerita una opinión judicial
EliminarImpresionante este artículo. Me voy encargar de difundirlo ya mismo!
ResponderEliminarSinceramente increíble que un funcionario le tenga que advertir al Gobierno sobre un acuerdo que se está realizando a espaldas de una provincia! Un trabajo impresionante Ignacio y Jose. Y después las clausulas secretas y los acuerdos que no se conocen. Extraordinario Mis mas sinceras felicitaciones y aguardo la segunda parte!
ResponderEliminarGracias, ojal+a sirva de algo difundir la situación
EliminarY a qué funcionario o funcionarios le pasamos la factura por esta traición a la patria?
ResponderEliminarLa justicia debe decidirlo
EliminarHay que leerla despacio. Es una catarata de datos y documentos estos que muestran la gravedad de la situación con la entrega de territorio argentino a militares chinos. Juicio YA!
ResponderEliminarY en la segunda parte la información es igual de sustantiva
EliminarPor lo visto, el informe de Lanata tenía razón y esto es la entrega lisa y llana de territorio a China vaya uno a saber por qué razón. Mis felicitaciones a los autores por tan extenso trabajo. Ya se los extrañaba mucho.
ResponderEliminarMuchas gracias Capitán!
EliminarSomos "los hijos de la pavota" y los funcionarios que tramitaron y aprobaron este tratado merecen ser enjuiciados por Traición a la Patria y demostraron ser unos verdaderos HDRMP
ResponderEliminarEs una diplomacia adolescente frente a negociadores milenarios. Asi nos va
EliminarY ese tal Doja dice eso con tanto desparpajo sobre una provincia en un documento oficial? Se nota que los K se cagaban olímpicamente hasta con los más chupaculos. Vaya uno a saber qué negociaron realmente al final y quien fue el que se forró de plata!
ResponderEliminarEs una posibilidad, alguna razón de peso tienen que tener para aprobar semejante acuerdo.
EliminarFuturo negro para Timerman y para la señora. Y para cada uno de los que votó este nefasto acuerdo con China, que aprovechó al mango la situación.
ResponderEliminarAl menos deberían dar explicaciones razonables para justificar tantas desprolijidades,.
EliminarLo que habría que descubrir es quién fue el que redactó esta entrega y colgarlo de las pelotas en una plaza pública.
ResponderEliminar¡Primero que vaya preso!
EliminarPara que después lo larguen? Ni en pedo!
Eliminarmas HUMO. la cosa es fácil, los acuerdos firmados los tiene el gobierno .. Este gobierno basta de humo por favor
ResponderEliminarEn tal caso solo basta con mostrarlos.
EliminarGracias!!! Son un lujo de investigación periodística que nos permite ver con claridad dónde estamos y en que condiciones.
ResponderEliminarGracias!
EliminarInformación recontra conocida. Pongan algo nuevo!
ResponderEliminarOk.
EliminarChicos habrá alguna forma de sintetizar esto? Es mucha la data toda junta para comprenderla.
ResponderEliminarES que sin desarrollo se pierde la posibilidad de documentar.
EliminarY habría que resumir el Código Civil para que entre en un panfleto, porque sino es difícil estudiarlo. Y el Quijote a unas 10 páginas, porque sino me aburro y no paso del principio. Y ya que estamos acortar la 9º Sinfonía de Beethoven porque sino me da fiaca y me duermo. A cada cosa su extensión justa, y esta nota la tiene. Cordiales saludos gente necesaria.
EliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarManga de traidores a la patria. Espero sinceramente que alguien tome medidas ya mismo contra esto!
ResponderEliminarQue hay para decir de la base Malargüe de la Agencia Espacial Europea?
ResponderEliminarSeguimos tu sugerencia y revisaremos los documentos
Eliminaryo estuve revisando documentos desde 2009 hasta hoy y no vi que tengan n° de razón social ni nada que se le parezca mucho menos boletas de luz, agua, gas etc. si alguien que no sean los chorros neoliberales de siempre + los chinos, gano con este acuerdo que me lo diga, por que consumen mas energías que tres pov.
ResponderEliminarNo sólo empresas fantasmas, ahora "textos fantasmas"! Cuanto amor a la plata, digo a la patria! no?. Ya podemos exigir que alguno de los involucrados de alguna explicación, digo! ó seguimos con impunidad total. Para cuando el plan pro.ce.sar?. Gracias por el trabajo que hicieron, excelente la narrativa; ustedes si son patriotas!
ResponderEliminarLo marqué el otro día, y ahora estoy terminando de introducir en mi cerebro tanta información.
ResponderEliminarSomos muchos quienes sospechamos cuando se dió a conocer este "acuerdo" que había algo turbio, y al leer todo mis dudas empezaron a encontrar respuestas. Más no se podía esperar del gobierno kirchnerista, defendiendo soberanía de las Malvinas con la zurda y vendiendo soberanía a China con la diestra.
Muchas gracias por brindarnos PERIODISMO. Es muy valioso lo que hacen!Que se venga la segunda nomás!
Me acabo de enterar de la lamentable noticia de la perdida de Jose.
ResponderEliminarGran tristeza.
Mis condolencias a la familia y a vos tambien Nacho que era tu compañero y amigo.
@seguidoresEnCer Daniel Antonio.
QEPD José María
ResponderEliminarGran tristeza.
No tengo twitter, tampoco palabras.
Un excelente periodista, siempre lo leía.
Como voy a extrañar las investigaciones.
Pido disculpas por hacer mis palabras por aquí.
Fine.
mis condolencias, se fue un periodista neto, un periodista de investigacion, fuerza a la familia y amigos.
ResponderEliminarExcelente, bien documentada y al detalle (como siempre)
ResponderEliminarPero hoy 4/2/16 me es imposible no entristecerme por la pérdida del periodista J.M.Stella, quien puso todo su oficio, su profesión e inteligencia, al servicio de los ciudadanos a quienes finalmente informó. Dice que el primer principio que se protege en otras partes del mundo, es el de la libertad de informar, pues si el mandante (pueblo) no está informado, no tomará las mejores decisiones. Él cuidó ese derecho de todos hasta el último instante.
José María Stella, se te va a extañar. Millones de gracias por todo tu esfuerzo, ha sido de una utilidad impresionante en estos últimos oscuros años de la República Argentina.
ResponderEliminarIgnacio Montes de Oca y familia de José María Stella, mis condolencias y dolor los acompañan. Un abrazo.
Excelente información! Lamento haberme enterado de esta página a raíz del artículo del diario perfil sobre el fallecimiento de Stella. Mis condolencias!
ResponderEliminarSoy neuquino y siempre desconfié de este arreglo y de la gestión de nuestras autoridades provinciales, los documentos por Uds. publicados dejan en claro que mis sospechas eran totalmente fundadas. Entiendo, eso si, que la Provincia mediante la política del poder de la chequera poderosa y la autorización o no de obras publicas fue casi obligada a aceptar las condiciones expuestas, pero no tuvieron la valentía de denunciar la situación. Lo indefendible es que sabiéndolo, cobarde y miserablemente, asumieron la defensa de semejante atropello y dislate contractual, de semejante negociado con el patrimonio de todos, de semejante entrega a una potencia extranjera, de este acto miserable y nos mintieron a todos los neuquinos descaradamente. Solo la exdiputada Kreitman, el ex diputado Ricardo Villar y unos pocos políticos más tuvieron la valentía - poco difundida por cierto por los medios coptados por el poder - de difundir y objetar el acuerdo.
ResponderEliminarun abrazo al equipo por la perdida de Jose Maria Stella...
ResponderEliminarCual es la novedad ??? Hay acuerdos secretos o sólo se pulió un preacuerdo ??? Me parece que hay humoooooo !!!!
ResponderEliminarLa segmentación de la sociedad china hace que los militares operen actividades que en otros lugares quizá estén en manos de científicos.
ResponderEliminarEn la Antártida Argentina hay muchos militares pero no por eso dichas bases dejan de ser científicas.
Asimismo resulta sintomático que habiendo riesgo de presencia militar ni Chile ni Brasil hubieran formulado ningún tipo de queja.
La única base militar china en el extranjero se está construyendo en Djibouti y ninguna página militar china contabiliza a las instalaciones en la Argentina como base militar.
Saludos.
excelente nota muchachos
ResponderEliminarE indignante ver como los cyber noobs k hablan de antiimperialistas y vendepatria y ellos hicieron lso opuesto... paradojas singulares
un saludo.
Matias.
FELICITACIONES Y MUCHAS GRACIAS !!! A ÉSTOS LES CABE MAL DESEMEPENO . INCUMPLIMIENTO DEL DEBER DE FUNCIONARIO PÚBLICO Y * TRAICIÓN A LA PATRIA * QUE ASÍ SEA....
ResponderEliminarY no pasa mas nada desde Febrero? estamos esperando mas investigaciones, la verdad que hacen un muy buen trabajo
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